CASA LEO

Casa Leo Entre lo vernáculo y lo contemporáneo Casa Leo es una residencia que revive el valor simbólico del arco y los elementos de ladrillo que durante mucho tiempo han sido parte de la tradición arquitectónica de México y los reinterpreta aquí como un gesto arquitectónico y un lenguaje formal. Estos motivos aparecen consistentemente en todas partes: en la composición de la fachada, en los grandes ventanales que dan al jardín, en los acabados decorativos que resaltan el interior de doble altura y en las barandillas de hierro forjado que completan el conjunto. La casa se organiza en torno a una planta baja amplia y versátil. El dormitorio principal se sitúa en este nivel para garantizar accesibilidad e independencia. En el corazón de la casa se encuentra una sala de estar de doble altura, un espacio que no sólo ancla la vida social sino que también regula la temperatura interior a través de su escala vertical. Desde aquí, una conexión visual y física perfecta se extiende hacia el jardín, abriendo el espacio al exterior y vinculándolo visualmente con el segundo piso. El comedor de planta abierta y la generosa cocina completan la distribución, diseñada para fomentar la convivencia y la luz natural. Arriba, la distribución refleja un carácter más íntimo. Una sala de televisión sirve como una acogedora área de reunión familiar y una transición entre los dos dormitorios secundarios. Cada uno cuenta con su propio baño privado y ventilación natural, lo que refuerza la importancia de la luz y la ventilación cruzada para el confort diario. Casa Leo se presenta como un ejercicio de síntesis, un diálogo entre tradición y modernidad que, a través del arco y el ladrillo, establece continuidad con la memoria material de la arquitectura mexicana y al mismo tiempo responde a las necesidades de la vida contemporánea.